Posterior a nuestra reunión anual de los seminaristas en La Serena me quedé pensando la falta que me hacía de tener algún compañero seminarista de mi generación para conversar y recordar experiencias vividas durante los años que pasamos en el Seminario. Así que de regreso en Santiago me dispuse entregarle a internet la responsabilidad de ayudarme a ubicar a mi amigo y ex compañero Víctor Rocher Ferrada, con tanta suerte que rápidamente hicimos contacto a través de email y de ahí a ponernos de acuerdo para encontrarnos no pasó mucho tiempo ya que él está viviendo en los alrededores de Santiago.
Debo contarles además que con Víctor fuimos compañeros durante toda la educación primaria en el Colegio San Antonio, aparte que también éramos compinches y camaradas de juegos en esa época linda de la niñez.
Finalmente nos encontramos en un restaurante del barrio Bellavista en Santiago y hablamos sin parar durante horas, donde quedé asombrado por la cantidad de información que guarda en su memoria, no sólo de nuestra época de estudiantes sino también de mi familia serenense.
Víctor es un tipo acogedor y muy inteligente. Con mucho camino recorrido en la vida, lo que lo hace ser una persona interesante de conocer.
Espero que podamos continuar esa amistad interrumpida hace 46 años atrás cuando dejamos nuestro Seminario Franciscano.
Debo contarles además que con Víctor fuimos compañeros durante toda la educación primaria en el Colegio San Antonio, aparte que también éramos compinches y camaradas de juegos en esa época linda de la niñez.
Finalmente nos encontramos en un restaurante del barrio Bellavista en Santiago y hablamos sin parar durante horas, donde quedé asombrado por la cantidad de información que guarda en su memoria, no sólo de nuestra época de estudiantes sino también de mi familia serenense.
Víctor es un tipo acogedor y muy inteligente. Con mucho camino recorrido en la vida, lo que lo hace ser una persona interesante de conocer.
Espero que podamos continuar esa amistad interrumpida hace 46 años atrás cuando dejamos nuestro Seminario Franciscano.
Con Víctor Rocher en "El mesón Nerudiano"