jueves, 23 de agosto de 2012

El padre Esteban Gregov, don Chato, Factotum...


Soy Juan Barrios, estudié en el seminario entre los años 1958 y 1961, compañero de Carlos Poblete, Juan Chavez, Gualbert Cordero. He encontrado el blog de Seraficos Franciscanos y me he enterado de vuestras actividades. Los felicito y espero poder unirme a ustedes el próximo año.
Lamento darles una mala noticia. Buscando a ustedes me encontré con la mala noticia de la muerte del padre Esteban Gregov, don Chato,Factotum y otros apelativos (RIP). Un gran hombre y mejor amigo. 
Me enseñó tantas cosas y estoy muy agradecido de él.

A continuación transcribo lo que se publicó a propósito de su fallecimiento:

Comunicamos a ustedes la triste noticia del fallecimiento de Padre Esteban (Stjepan) Gregov ocurrido en la ciudad de San Blas el martes 24 de abril próximo pasado.
El padre Esteban fue un hombre  rico por su gran sencillez de corazón y generosidad, digno hermano de San Francisco de Asís.
Trabajó durante toda su vida dentro de la Comunidad Croata, y durante muchos años estuvo al frente del Centro Croata de San Justo, donde celebraba Misa en la Iglesia que tenía a su cargo, San Leopoldo Mandic.
Por su enfermedad, en este último año permaneció en el Centro Croata de Tejar, bajo los cuidados del padre Joso.


Dedicó una gran parte de su vida a trabajar en las villas miserias, entre las cuales se destaca su trabajo en Fuerte Apache, donde fue muy querido.
Nació en Croacia el 30 de Enero de 1936 en Pasman, provincia de Dalmacia.
Sus padres fueron Agustín y Petrona, un herrero artesano y un ama de casa.
Toda la familia era muy devota. El padre Esteban decía siempre que sintió el llamado de Jesús desde muy pequeño, pero al ir creciendo, su vocación se tornó difícil de alcanzar por el comunismo que reinaba en Croacia. La situación en el país era muy difícil.
Una noche de 1954, decidió escapar con otros cinco amigos. Robaron un bote de madera, y con él su objetivo era llegar hasta Italia. Atravesar el mar era su única esperanza de encontrar la libertad, un valor que ya escaseaba hace rato en Croacia, y quienes deseaban recuperarla, vivían bajo amenaza de muerte. Esteban y sus amigos rondaban los 17 años de edad, algunos de ellos todavía no los habían cumplido. La noche que escaparon, no llevaron consigo otra cosa que sus ropas y unos odres (envases de cuero) en los cuales llevaban bebidas, para poder sobrevivir en la travesía.

Entre la costa italiana y la ciudad costera croata desde donde partieron, había unos 200 kilómetros. Al comenzar el escape, los soldados comunistas los avistaron y comenzaron la persecución. Una vez que se adentraron en el mar, la situación climática fue de mal en peor, y tanto las vidas de Esteban y sus amigos, como de los soldados comunistas que los perseguían, comenzaron a correr peligro: Había comenzado una gran tormenta en medio del mar, que parecía no tener fin. Los soldados comunistas habían abandonado la persecución hacía rato ya, pero los seis amigos siguieron adelante, a pesar de la violencia de las olas y de la lluvia. En momentos en que Esteban pensó que no lograrían sobrevivir, hizo una promesa a la Vírgen María. Prometió que, si llegaban con vida a la costa italiana, construiría una Iglesia que llevaría su nombre, como agradecimiento .
¨Stella Maris¨ (¨Estrella de Mar¨) es el nombre que hoy lleva la Iglesia que Padre Esteban construyó ya hace muchísimos años con un grupo de amigos y colaboradores, en honor de Nuestra Señora en San Blas, cumpliendo así la promesa que hiciera, durante aquella tormenta, en el medio del mar.
Y ese es el lugar en el que eligió pasar sus últimos días. 


 Que Dios le de descanso eterno y un lugar a Su lado, por todas las cosas buenas que hizo en su paso por esta tierra.

Pokoj vjecni daruj mu, Gospodine!
I neka svijetlost vjecna svijetli na njemu!
Pocivao u miru, Amen!
Ljilja Vlaho

2 comentarios:

Jorge Acuña dijo...

Esta publicación sobre el Padre Esteban Gregov fue posible gracias a la investigación que realizó el ex seminarista Juan Barrios.

Miguel Zuleta dijo...

Felicitaciones, excelente el reportaje y la colaboración de Juan y por supuesto de Jorge que a pesar de su operación igualmente se las arregla para mantener el blog.